Test ADOS-2

El Test ADOS-2 (Autism Diagnostic Observation Schedule, Second Edition) es una evaluación semiestructurada y estandarizada que se utiliza como una herramienta clave en el proceso diagnóstico del Trastorno del Espectro Autista (TEA). Consiste en una serie de actividades interactivas y módulos adaptados a la edad y el nivel de desarrollo de la persona evaluada, desde niños pequeños hasta adultos. Durante la aplicación, un examinador entrenado observa y codifica las conductas del individuo en áreas cruciales para el diagnóstico de TEA, como la comunicación, la interacción social, el juego (en niños) y la presencia de comportamientos repetitivos y restringidos.

En cuanto a si es motivo de preocupación o invasivo, es importante entender su propósito. El ADOS-2 es una herramienta diseñada para ayudar a comprender mejor el perfil de una persona en relación con las características del TEA. No es un examen médico invasivo; se basa en la observación de conductas naturales durante interacciones guiadas. Si bien la evaluación puede generar ansiedad en algunas personas o familias debido a la incertidumbre del proceso diagnóstico, su objetivo final es proporcionar información valiosa para acceder a apoyos y terapias adecuadas. La realización del test debe ser explicada de manera clara y sensible, enfatizando que busca entender las fortalezas y desafíos de la persona.

La forma en que se realiza el ADOS-2 varía según el módulo aplicado, que se selecciona en función de la edad y el nivel de lenguaje expresivo del evaluado. Generalmente, implica una serie de actividades lúdicas, conversaciones y tareas diseñadas para elicitar comportamientos específicos. El examinador interactúa con la persona, presentando diferentes situaciones y observando cómo responde. No se trata de un examen de "correcto" o "incorrecto", sino de registrar la presencia o ausencia de ciertas conductas y la manera en que se manifiestan. La información recopilada se codifica siguiendo un protocolo estandarizado, lo que permite comparar los resultados con criterios diagnósticos y con patrones observados en personas con y sin TEA.